Mucho se habla de la importancia de una buena alimentación para rendir bien en las diversas actividades que realicemos, sean estudios, deportes, actividades culturales, etc.  Pero, ¿qué alimentos son recomendables para rendir bien? Aquí algunos datos interesantes.

Desayuna como rey, almuerza como príncipe y cena como mendigo Tras casi 8 horas sin probar bocado, el organismo necesita de nutrientes que den energía para comenzar el día. Consumir carbohidratos y calorías por la mañana no solo ayuda a ?mantenerse? en pie en un día largo y agotador, sino que reduce la ansiedad y el apetito, con lo que trae el beneficio secundario de ayudar a perder peso. Un vaso de leche y/o un plato de avena son la mejor opción.

Agua eres De acuerdo con estudios realizados en la Universidad Politécnica de Madrid, la pérdida de solo el 2% de agua en el cuerpo disminuye el rendimiento intelectual, mermando los niveles de atención, concentración y memoria a corto plazo, además de afectar la discriminación perceptiva y la rapidez mental. Ojo, sentir sed es ya una señal de deshidratación; 2 litros de agua al día ayudan a  prevenir esto (se sugiere beber más si eres deportista o haces ejercicio, pues la falta de hidratación adecuada reduce las habilidades motoras y la velocidad de reacción).

¿Para qué era que comía esto? Investigaciones británicas han encontrado que la vitamina B12, que se encuentra en la carne, el pescado y la leche, puede prevenir la pérdida de memoria. Los huevos también mantienen el cerebro en estado de alerta y ayudan a la memoria a largo plazo.

Enfócate Según un estudio publicado en el ?Nutrition Journal?, el aceite de pescado puede ayudar a aumentar la capacidad de concentración. ¿Y dónde lo encuentras? Pues esencialmente en sardinas, salmón, trucha, mero y atún. De igual manera, los granos y cereales integrales (pan integral, tortillas de maíz o de trigo), los frijoles, garbanzos, avena, camote, plátano, papa con cáscara y el choclo proveen fibra, lo que ayuda a  mejorar el desempeño y la concentración. Un palto de frijoles negros, por ejemplo, mejorará tu desempeño físico y mental, y evitará que estés cabeceando en clase. Las nueces y el pollo también pueden contribuir con este fin.

Estrés, esdos, esuno, escero Las frutas y verduras de color morado, tales como la col morada, la betarraga y las moras, así como las hojas verdes (espinaca, lechuga, perejil, acelga), el pescado y las lentejas, son relajantes por excelencia. Y si estos alimentos no son de tu agrado, hay buenas noticias. Aunque no lo creas, masticar chicle ayuda a dominar la tensión y, según científicos australianos, quien lo hace al mismo tiempo que realiza múltiples tareas, experimenta un descenso del 17% de estrés. Y la cosa se pone mejor. Si te gusta el chocolate, consumir aproximadamente 40 gs diarios también reduce el de estrés, mejor si se trata de chocolate negro o bitter. El mismo efecto puede causar comer pistachos o un par de nueces al día. Entre los líquidos, la leche, el yogurt, las infusiones (té negro, té verde, valeriana, manzanilla y tisana), el jugo de limón y una copa de vino ayudan a limpiar el organismo y combaten no solo el estrés, sino también (en el caso del vino) la depresión y la ansiedad.

¿Qué evitar? Cereales y jugos altamente azucarados, embutidos grasos, harinas refinadas (panes y tortas? sí, cupcakes también), bebidas con cafeína y grasas saturadas en exceso.

 Jorge Pérez-ReyesPsicólogo

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