Comienza un nuevo ciclo, y las dudas sobre cómo optimizar el tiempo de estudio empiezan a emerger. Aquí te presentamos algunas pautas que debes considerar para aprovechar al máximo el tiempo; si quieres profundizar en ellas, puedes visitarnos en Desarrollo y Bienestar Estudiantil.

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1. Define horas de estudio para cada curso en el que te hayas matriculado. Estas horas deben ser fijas a lo largo de todo el semestre. Por ejemplo, si has decidido estudiar el curso X los martes por la tarde y los jueves por la mañana, debes reservar ese espacio para ese curso por todo el semestre.

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2. Menos es más. Una sesión de estudio no debe exceder las dos horas y media (lo recomendable son dos horas). Puede parecer insuficiente, pero dedicar dos o tres sesiones de estudio a un curso a lo largo de la semana, es más productivo que pasar cinco horas seguidas estudiando, pues el cerebro se ?sobrecarga? y ya no procesa información.

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3. Descansa. Lo ideal es, por cada hora, estudiar 45 minutos y descansar 10 o 15. Si te cuesta mucho concentrarte por 45 minutos seguidos, comienza así: las dos primeras semanas estudias 15 minutos y descansas 5, a la tercera semana subes a 20 minutos, a la siguiente semana ya pasas a 30 minutos y 10 de descanso. Para la quinta semana, deberías estar en condiciones para ?aguantar? los 45 minutos óptimos. Piensa en el entrenamiento físico: nadie hace 100 abdominales el primer día, ¿o sí? Lo mismo ocurre con la concentración.

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4. Persevera. Si sientes que no logras cumplir con el horario que has planteado, no te frustres. Ten presente que una conducta tarda entre 14 y 21 días en convertirse en un hábito.

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5. Define metas. Cada sesión de estudio debe tener un objetivo previamente definido, de acuerdo al tema del curso.

En una siguiente entrada veremos cómo pueden establecerse estos objetivos por sesión.¿Tienes alguna recomendación que podría resultarle útil a tus compañeros? Anímate a compartirla aquí.